Banda: Skaldr
Título: Saṃsṛ
Año: 2025
País: EEUU
Formato: Álbum
Duración: 43 minutos
Discográfica: Avantgarde Music
Género: Black Metal
Banda: Skaldr
Título: Saṃsṛ
Año: 2025
País: EEUU
Formato: Álbum
Duración: 43 minutos
Discográfica: Avantgarde Music
Género: Black Metal
Nuevamente Estados Unidos vuelve a sorprendernos con otra banda salida de la nada y que ralla a un gran nivel. Si en el género del Black Metal, a mi personalmente tampoco era un país que sacase mis producciones favoritas (que si, que menos mal que estaban Judas Iscariot, Krohm, Weakling, Lurker of Chalice, Abazagorath y alguno más que se me escapa fijo), había demasiada producción para que centrase en ellos. En los últimos años, en cambio, ha salido grupos uno tras otro que llaman mi atención por méritos más que suficientes: todo lo de Blood & Crescent, el colectivo Weregild, Vanagandr y. en este rollo Black/Death, Dumal y, por encima de todo, Moribund Dawn. Añadamos a estos Skaldr a la ecuación.
Segundo disco en el que afianzan este sonido sueco de Black/Death, no son tanto como sus compatriotas ya nombrados que tiran más del rollo Sacramentum, Vinterland, Dissection o Unanimated sino que me recuerdan más al rollito del que tirarían un grupo bueno bueno pero tengo la sensación de que siempre se nos olvida que es Dawn. Siete temas bastante equilibrados, largos, con contenidos y enjundia en los que predominan riff intensos, melodías curradas y con gancho, preciosistas y con menos cambios de ritmo quizás que no realza la parte tan Death Metal. Prefieren mantener los riffs en progresiones más largas que otros compañeros de sonido.
Esto no quita que no les hagan ascos a sus temas más Dissection como podría ser el mismo «The crossing» que tiene esos riffs tan «Unhallowed» y que suenan demoledores. Pero, para mi el tema que abre es espectacular. «The sum of all loss» podría entrar perfectamente en el Slaughtersun sin despeinarse con esas melodías triunfales y tan jodidamente épicas siempre con unas guitarras que van por todo lo alto. Por supuesto, otros grandes tropos del estilo están bien presentes: el uso de las guitarras acústicas así como las narraciones con voces profundas. Lo dicho, un clásico inevitable que añade un magnífico gusto al disco.
Grandes cabalgatas épicas con temas como «Storm colide» o el gigantesco cierre de «The cinder, the flame, the sun» pura intensidad agresivo-melódica con ese sonido que podría haber cuadrado en cualquier disco de la época. No obstante ha sido grabado en los Unisound, como todos los discos de la época, por supuesto a cargo de Dan Swano y suena a lo que suena. No puede ser de otra manera. La portada, llamativa y con tonos azules, por supuesto acorde a la música de tonos azules y el título, en sánscrito, hace referencia al cambio o a la búsqueda de un refugio interior. Todo cuadra en el grupo… si hasta el bajista tocó en directo con Sacramentum.
Por supuesto, habrá a quien esto le parezca blando o manido. Pues chico, qué quieres que te diga, más grupos en plan Dawn o Dissection en el mundo y menos grupos de dormitorio que imitan como monos a las LLN. Si te mola el rollo antes nombrado o nuestros connacionales Nakkiga, entra que estás en tu casa.