Crítica: MURDERWORKER: «Where the Scum Becomes Dinner»

Segundo álbum de estos veteranos sevillanos (llevan décadas con otras formaciones de su zona), anclados en la vieja escuela del Death Metal, Su música recuerda mucho a bandas clásicas como Dismember, Entombed, Grave, Unleashed, y ese largo etcétera de Suecia, pero ahí no termina la cosa, porque son capaces de hacernos sentir también la música de Bolt Thrower, Pestilence, Obituary o Asphyx, aunque el sonido es puro Swedish Death, sus influencias varían así como sus composiciones.

Lo cierto es que este nuevo álbum me ha gustado mucho más que el anterior, no sé, debería de ponerlo de nuevo para comparar hoy en día ambos trabajos, pero os aseguro que «Where the Scum Becomes Dinner» es mucho más maduro y trabajado, creo que la cosa está en la eficacia que han conseguido con la estructura de los riffs ya que estos nuevos temas tienen mucha más pegada y garra que el material anterior.

No me extraña que se estén leyendo muy buenas críticas del disco por que realmente está muy logrado en su totalidad, el disco cuenta con 10 temas en los 38 minutos de duración, la portada ha sido obra de José Antonio Víves, artista que ya cuenta con un notable currículum en el tema de «artworks». El disco lo edita Base Records Productions, salió el 23 de diciembre en plena víspera navideña.

No digo más, un álbum notable de una banda que puede convertirse en todo un referente de nuestra escena, el tiempo lo dirá, mientras, disfrutemos con este último disco si os gusta la época dorada del género.