Crítica: FAIDRA ”Militant : Penitent : Triumphant»

El día 3 de noviembre, la banda Faidra de Suecia estrenó su segundo full álbum Militant : Penitent : Triumphant a través de Northern Silence Productions quienes afirmaron que ha sido el álbum más vendido en preventa en los 20 años de la historia del sello alemán.

Hace tres años, cuando salió su primer trabajo Six voices inside me pareció una propuesta bastante interesante: la mezcla riffs melódicos clásicos del black metal sueco pero con una atmósfera oscura y constante que se crea a partir de los teclados e inclusión de sonidos folclóricos por medio del sintetizador o de la guitarra acústica, los cuales trasladan la mente a una época medieval, sumándole los juegos de voces y coros sutiles hacen que cada tema sean únicos y es por ello que este estilo se convierte en uno de mis favoritos al ser tan completo y elaborado.

Cabe destacar que este es un proyecto de un solo hombre del cual no sabemos su identidad, por esta razón, la composición musical al estar toda elaborada y ejecutada por una sola mente logra un sonido tan compacto, pues está pensado hasta el más mínimo detalle.

Este álbum consta de 6 temas que están llenos de historia pues la penitencia y la redención son el eje teórico como se puede apreciar desde la carátula del disco, es una pintura barroca del artista italiano Salvator Rosa “The Ghost of Samuel Appearing to Saul and the Witch of Endor” 1668. Es una representación de un pasaje bíblico donde el rey de Israel Saúl visita a una bruja nigromante de Endor para consultar sobre su próxima batalla contra los filisteos.

La bruja está representada como un hombre que prende fuego con una rama de la cual emergen criaturas y bestias esqueléticas e invoca al espíritu del profeta Samuel (hombre con túnica blanca) quien en vida fue su mentor, dicho acto asusta al rey quien está agachado en el suelo con su armadura de guerra. El espíritu manifiesta que Dios lo ha abandonado por sus múltiples pecados y declara que sus tres hijos morirán en batalla y David se apoderará de su trono. Al día siguiente la profecía fue cumplida y Saúl devastado se da muerte lanzándose sobre su propia espada. Esta pieza se exhibe actualmente en el museo de Louvre en París, Francia, y si no has escuchado este proyecto ¡te invito a hacerlo!